Con lágrimas, música y un cielo perfecto, Katy Perry despegó rumbo al espacio este lunes 14 de abril, en un vuelo inolvidable con una tripulación completamente femenina. A bordo de un cohete de Blue Origin, la artista internacional se unió a otras cinco mujeres pioneras en una misión que, más allá de alcanzar la línea de Kármán —el umbral simbólico del espacio exterior—, buscó inspirar, rendir homenaje y enviar un poderoso mensaje: “Todo esto es para beneficio de la Tierra”.
El viaje, lanzado desde Texas, fue organizado por la compañía de Jeff Bezos, y contó con la presencia de figuras como Lauren Sánchez (prometida de Bezos), Gayle King (copresentadora de CBS Mornings), la ingeniera Aisha Bowe, la activista Amanda Nguyen y la productora Kerianne Flynn. La cápsula atravesó la atmósfera a casi Mach 3, permitiendo a las tripulantes flotar en ingravidez y contemplar nuestro planeta desde una perspectiva sin precedentes.
???? Un vuelo al espacio que marcó historia.
Apenas tres minutos después del despegue, la cápsula se separó del propulsor y alcanzó los 100 km de altura. Ahí, Perry sorprendió a todas al cantar suavemente «What a Wonderful World», la icónica canción de Louis Armstrong, mientras descendían. Rechazó interpretar sus propios éxitos —como «Roar» o «Firework»— porque, en sus palabras, “no se trata de mí. Se trata de nosotros y de este maravilloso mundo que debemos cuidar”.
Al aterrizar, los paracaídas se desplegaron y la cápsula tocó tierra suavemente en el desierto, recibiendo una ovación entre gritos de alegría. Al salir, Perry alzó una margarita blanca —probablemente en homenaje a su hija, Daisy Dove— antes de caer de rodillas y besar el suelo, visiblemente conmovida.
Bezos fue quien abrió la escotilla, recibiendo a su pareja Lauren Sánchez con un emotivo abrazo. Mientras tanto, la periodista Gayle King describió la experiencia como “genuina” y “transformadora”, admitiendo que jamás pensó en sí misma como astronauta. Para ella, el miedo se transformó en valentía, y el cielo en un nuevo punto de partida.
???? Un mensaje desde el espacio para futuras generaciones.
Katy Perry confesó que esta experiencia ocupa el segundo lugar más importante de su vida, justo después de ser madre. “Fue difícil irme, porque todo mi amor está en casa con mi hija. Pero hay que rendirse y confiar en que el universo te cuidará”, expresó.
Aseguró también que este vuelo será fuente de inspiración para nuevas canciones —e incluso reveló parte del setlist de su próxima gira Lifetimes mientras estaba en órbita. La artista calificó el viaje como un “10 de 10”, y animó a otras mujeres a seguir ocupando estos espacios, literal y simbólicamente.
Este no fue solo un espectáculo mediático. Fue una declaración. Fue arte, ciencia, empoderamiento y emoción. Fue un recordatorio de que mirar hacia las estrellas es también una forma de cuidar nuestro planeta.
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